Asitencia psicológica a domicilio

Senda Social

Valencia
606095537
sendasocial@gmail.com

Las lagrimas son lluvia de emociones. son descargas naturales de sentimientos que necesitan expresarse, y sirven para liberar al cuerpo de una sobrecarga de tristeza.

,

Cuando la lengua ya no es capaz de expresar
una emoción
ya sólo pueden hablar los ojos…

 estado Depresivo.

 

Cuando estamos deprimidos, nos falta energía y ánimo para todo. El “no me apetece”…se convierte en nuestra insignia con la que cumplimos servilmente encerrados en nuestra propia soledad,  cargada de pensamientos pesimistas, derrotistas y culpabilizadores.

Lo que está claro es que dentro de este estado hermético e introspectivo  no vamos a encontrar la solución a nuestros problemas, por así decirlo, porque no siempre un estado depresivo se produce por una reacción a un acontecimiento, en  determinadas ocasiones viene derivado como por ejemplo, por cambios hormonales a los que se les van sumando pensamientos intrusos de corte negativo, que al final se apoderan de nuestro estado. Controlar nuestras emociones es complicado, pero no imposible, al igual que es posible cambiar nuestra forma de pensar e interpretar lo que nos está pasando y percibir el mundo que nos rodea, parece un tópico pero es cuestión de actitud.

Si bien lo pensamos, en determinadas ocasiones un estado depresivo puede incluso ser adaptativo, ya que nos exige que nos detengamos, reflexionemos, reservemos energías,…sin duda es un estado de alarma del cuerpo que nos indica que algo no funciona y que debemos trabajar para cambiarlo. Y es necesario creer en el cambio para poder actuar, permitiéndonos haber estado mal, para acto seguido dar pequeños pasos que nos permitan cobrar la homeostasis anímica para funcionar en el mundo social y recobrar las fuerzas para guiar nuestra vida.

Quisiera diferenciar entre depresión y pensamientos comunes en la depresión (desadaptativos). Y son estos pensamientos los que realmente nos alejan del camino de la acción, para sumergirnos en el mundo de la quietud y desesperanza.  Si los vamos alimentando prestándoles atención y convirtiéndolos en un guión de nuestra vida nos pueden  llevar a dejar de tener interés por ella, y es ahí donde debemos actuar.

También es muy importante la percepción  y las sensaciones que recibimos de nuestro entorno. ¡Sencillo!, no es lo mismo estar a solas en una habitación mal iluminada y fría, que en una habitación donde predominan los colores y la calidez. No es lo mismo estar solo, que sentir el calor y tacto de una mano amiga, etc. Son pequeñas cosas pero que generan un impacto en nuestro cerebro y en nuestro estado.

Cuando nos encontramos en un estado depresivo creo que es importante que nos escuchemos a nosotros mismos, escuchar que nos estamos diciendo y cómo nos estamos tratando, y sabernos decir  “Stop”. Mi mundo interior lo creo yo con mis pensamientos, si intento desviar la atención hacia temas más positivos, si doy un pequeño paso y venzo la pereza, si voy siendo consciente de que no pierdo nada intentándolo…

Ese bello momento en el que comprendes que no hay nada más valioso en tu vida que vivirla.

 Comienza a permitir un cambio que te haga reaccionar y a ser consciente que cuando uno se encuentra tan mal y tan hundido con poco que hagas por ti ya estarás mejor de lo que estabas y así poco a poco, con pequeños pasos, tomándonos nuestro tiempo  para reaccionar …pero reaccionando , (es necesaria la acción por poca que sea, todo fluye , nada permanece inerte y sin cambios , hasta las rocas se transforman ), y aprendiendo a convivir con esa trasformación, comprobaras que las cosas pueden cambiar.  Hay cambios que no son rápidos, y la paciencia, el tesón  y la acción se convierten en virtud….

La vida es algo maravilloso. Más allá de lo que percibimos o conocemos existe un mundo infinito de posibilidades y experiencias que solo son aptas para aquellos que las quieren ver, percibir e integrar en su vida.

Si estas reflexiones generan en ti una reacción y te has tomado el interés de leerlas, vas en el buen camino, ya has hecho algo más.